Los Juegos Olímpicos apenas empiezan y las críticas y comentarios negativos hacia los deportistas ya inundan las redes.
Un atleta olímpico entrega su vida al deporte, a una vida de disciplina, a una dieta estricta, a no ir a fiestas, a privarte de pasar fechas importantes con tu familia, a lesiones constantes, a la falta de apoyo, a una constante presión psicológica, falta de instalaciones adecuadas, a una gran desventaja contra otros países que lo tienen todo y aún así sacan la casta, no se rinden, lo dan todo, ponen y anteponen todo por México.
Fueron, son y serán un gran orgullo.
La mejor de las vibras en estos Juegos Olímpicos y si nos unimos como país por el deporte estoy seguro que las cosas cambiarán.






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