Durante el juego entre Rojos de Jiménez y Mineros de Parral, se reportaron altercados entre aficiones. El club Rojos emite comunicado reafirmando su compromiso con el respeto y el ambiente familiar en el Estadio 21 de Marzo.

Durante el arranque de la Jornada 6 en el Campeonato Estatal de Béisbol de Chihuahua, el duelo entre Rojos de Jiménez y Mineros de Parral vivió momentos de alta intensidad no sólo dentro del terreno, sino también en las gradas del Estadio 21 de Marzo.

De acuerdo con varios testimonios y reportes compartidos en redes sociales, se registraron altercados verbales y un ambiente hostil entre sectores de la porra local y aficionados visitantes, en especial en la zona ubicada detrás del dogout de Mineros. Algunos de los señalamientos incluyeron gritos, burlas e incluso insultos dirigidos tanto a jugadores como al cuerpo de ampayers, hechos que diversos testigos calificaron como “incómodos” y “fuera del tono familiar que caracteriza al beisbol estatal”.

La controversia escaló cuando usuarios identificaron presuntamente a la jurisdiccional de la Octava Zona, Minerva López, participando de los incidentes, lo cual encendió aún más el debate en plataformas digitales.

Ante la situación, la directiva de los Rojos de Jiménez emitió un comunicado oficial este viernes en el que reconoce los hechos, los califica como aislados, y reafirma su compromiso por mantener un ambiente de respeto y convivencia dentro del estadio.

Además, el equipo anunció que se analizarán los reportes del partido y que se tomarán las medidas necesarias para evitar situaciones similares en el futuro.

Esta situación reabre el debate sobre el papel de las porras, el consumo de alcohol en estadios y el ambiente que debe prevalecer en los encuentros del estatal, especialmente cuando equipos con alta rivalidad, como Jiménez y Parral, se enfrentan.